La selección española femenina de fútbol sigue haciendo probaturas para la gran cita del verano que viene en la Eurocopa 2025 que se jugará en Suiza. El único gran torneo que le falta por conquistar a la roja, que tendrá la oportunidad de redimirse del varapalo que supuso no ganar ninguna medalla en los pasados Juegos Olímpicos. Allí se espera que esté Vicky López, una de las joyas del fútbol español. 

España empató en este mismo parón de selecciones ante Canadá (1-1) y volvió a repetir tanteo este martes ante Italia. Las azzurras neutralizaron en el 88′ con un golazo de Beccari, una promesa italiana, el tanto de Alba Redondo en el 86′. Sin embargo, la seleccionadora Montse Tomé puede sacar conclusiones positivas de ambos duelos. Las bajas de jugadoras importantes y la transición que está viviendo la selección permite que otras futbolistas piquen a la puerta e incluso la tiren abajo reclamando protagonismo. 

Es el caso de Vicky, jugadora del FC Barcelona de apenas 18 años, que en su primer partido completo como internacional absoluta ha demostrado que está lista para agregar todavía más talento a un centro del campo en el que futbolistas como Aitana Bonmatí, reciente balón de oro, o Alexia y Patri siguen siendo vitales. 

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Ella aporta el desparpajo de la juventud, de la que primero ejecuta y luego pregunta. Es buena y lo sabe. Pisa la pelota, para el tiempo con el balón en sus pies y entonces, decide si prefiere acelerar la jugada y romper líneas con sus conducciones o volver a empezar. No es veterana, pero juega como si lo fuera. Es una elegida para esto del balón pie. Tiene visión de juego, conducción, remate, gol, carácter y humildad. A España le ha faltado contundencia arriba en este parón de selecciones, y eso que Vicky también lo ha intentado varias veces con tiros lejanos, pero a la selección en general y a ella en particular le sobra magia. 

Los amistosos han evidenciado que hay que mejorar de cara a portería, pero también que hay más razones para ser optimistas que pesimistas de cara al futuro. Cuando se puedan juntar en el campo la clase de Jenni Hermoso y Alexia, la madurez de Aitana, Tere o Patri, la velocidad de Salma y Athenea con el descaro de jugadoras como Vicky, el pueblo volverá a vibrar con ellas tal y como hizo hace dos veranos al hacer historia ganando la copa del mundo.