Rubén Baraja ha comparecido este viernes en sala de prensa y ha hablado, básicamente, del lamentable episodio protagonizado por Rafa Mir, acusado de una supuesta agresión sexual el pasado sábado en su casa. El entrenador del Valencia ha dicho que «es importante explicar las cosas para que la afición sepa cómo han ido las cosas y cómo hemos actuado el club y yo». 

«Cuando sucede el episodio el club valora la decisión a tomar y decide readmitirlo. A partir de ahí yo valoro lo deportivo y tomo la decisión de que se quede fuera dos partidos. La semana que viene irá reincorporándose. Y ya decidiré yo si participa o no en los partidos». «Es muy difícil tomar una decisión que le pueda gustar a todos, pero hemos intentado hacer las cosas con sentido común». 

«Él, en su momento, se disculpa con la plantilla y admite que no ha actuado correctamente, que acepta el castigo impuesto. En mi opinión, un acto de indisciplina debe tener unas consecuencias. Una persona se puede equivocar y tenemos que dar una segunda oportunidad». 

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Asimismo, defendió las declaraciones del pasado miércoles de Pepelu, que indicó este martes que lo que hizo Rafa Mir el pasado sábado tras el encuentro ante el Villarreal era «una falta de respeto hacia el club y la afición» y que la situación del equipo «no está para ese tipo de cosas». «Pepelu es una voz autorizada en el vestuario y suscribo al cien por cien su opinión, porque es lo que opino. Hay determinadas cosas que no se pueden hacer, el equipo no ha arrancado bien y tenemos que tener unos mínimos como profesionales», incidió.

Así, recalcó que el Valencia tiene «un escudo en el pecho» y subrayó que le dijo al propio Rafa Mir que tiene «una gran decepción”, porque asume que fue él mismo quien valoró su llegada porque «podía dar soluciones en ataque». Preguntado por la posible reacción de la afición tanto del Valencia como del resto de equipos respecto a Mir en un terreno de juego, insistió en que ese «es un melón por abrir» y no saben lo que va a suceder.

«Ha sido y va a ser una situación difícil de gestionar”, comentó Baraja, que concluyó que el delantero tendrá que «sobrellevar esta situación y entre todos ayudarle a que tenga un sentimiento de persona respetada».