Luis Gil, el joven lanzador de los Yankees de Nueva York, demostró estar en un estado de forma excepcional en su regreso al montículo tras una lesión en la espalda. Con una salida dominante, Gil guió a su equipo a una victoria por 3-0 sobre los Cubs de Chicago en el Wrigley Field.

En su primera apertura desde el 20 de agosto, Gil lanzó seis entradas de calidad, permitiendo apenas un sencillo y ponchando a siete bateadores. Su regreso fue un impulso crucial para los Yankees, que han estado luchando por mantener el ritmo de los líderes de la División Este de la Liga Americana.

Aaron Judge, la estrella de los Yankees, contribuyó al triunfo con un doble impulsador y una anotación. El poderoso toletero continúa su racha de juegos sin jonrón, que ahora se extiende a 10 partidos.

La victoria de los Yankees les permitió mejorar su récord a 81-60, acercándose a los Orioles de Baltimore, líderes de la división. Por su parte, los Cachorros cayeron por tercera vez en cuatro juegos, lo que podría complicar sus aspiraciones de alcanzar el tercer comodín de la Liga Nacional.

Gil, quien se perdió la mayor parte de las últimas dos temporadas debido a una cirugía Tommy John, ha demostrado un notable progreso en su recuperación. Con su actuación del viernes, el joven lanzador reafirmó su potencial y se posiciona como una pieza clave para los Yankees para la postemporada.

Además de Gil, el bullpen de los Yankees también jugó un papel vital en la victoria. Jake Cousins y Tommy Kahnle lanzaron una entrada cada uno, y Luke Weaver cerró el juego con su primer salvamento en 199 apariciones en las Grandes Ligas.