Los Dodgers de Los Ángeles, con la actitud de un equipo subestimado, han demostrado por qué han sido de los favoritos para ganar la Serie Mundial. Después de vencer a los Padres de San Diego en un emocionante Juego 5 de la Serie Divisional de la Liga Nacional (NLDS), los Dodgers avanzaron a la siguiente ronda con una declaración de intenciones.

Max Muncy, el tercera base de los Dodgers, no se guardó nada y lanzó una crítica directa a los «expertos» que los habían dado por vencidos a pesar de su destacada temporada regular. «¿Qué era? ¿El 80% de esos malditos expertos dijeron que íbamos a perder?», espetó Muncy. }

«Al diablo con ellos! Sabemos quiénes somos. Somos el maldito mejor equipo de béisbol, y estamos aquí para demostrarlo.»

También en rede sociales Muncy hizo su grito saber con más groserías incluidas:

Aunque la cifra exacta del 80% puede ser una exageración, nostros en Al Bat entramos en la lista, lo cierto es que muchos analistas habían favorecido a los Padres para ganar la serie. Los Dodgers, a pesar de su récord, se habían visto superados por los Padres en los primeros juegos, lo que alimentó las dudas sobre sus posibilidades de avanzar.

Sin embargo, los Dodgers demostraron una gran resiliencia y carácter. Tras ir abajo 2-1 en la serie, los azules lograron imponerse en los dos últimos juegos, gracias a una sólida actuación de su pitcheo y a una ofensiva oportuna.

«Los Padres tuvieron una oportunidad de cerrar la serie en casa en el Juego 4, donde habían comenzado con un perfecto 3-0 en la postemporada.», señaló Mark Sheldon de MLB.com. «Además, poseían un récord ganador de 8-5 contra los Dodgers en la temporada regular y anotaron al menos cinco carreras en cada uno de los primeros tres juegos de la serie.»

A pesar de estas estadísticas favorables, la ofensiva de los Padres se apagó por completo en los últimos tres juegos. «Los Padres se quedaron sin carreras en las últimas 24 entradas de la serie.», agregó Sheldon. «Es la sequía anotadora más larga de un solo equipo en playoffs desde los Bravos de Atlanta de 1991 en la NLCS contra los Piratas de Pittsburgh.»

Con esta victoria, los Dodgers no solo avanzaron a la siguiente ronda, sino que también demostraron que tienen el carácter y la determinación para superar cualquier obstáculo. Muncy y sus compañeros han dejado claro que no están dispuestos a dejar que nadie les diga lo que pueden o no pueden hacer.

Ahora, los Dodgers se preparan para enfrentar a los Mets de Nueva York en la Serie de Campeonato de la Liga Nacional. Con la confianza por las nubes y la motivación de haber silenciado a los críticos, los azules de Los Ángeles llegan a esta serie como uno de los favoritos para avanzar a la Serie Mundial.