En el vestuario de Montilivi, tras el 1-4 del Barça al Girona, se vivió un momento muy significativo por un doble motivo que habla del buen momento del equipo azulgrana: compañerismo y ambición.

Que la plantilla es una piña lo demostró la camiseta regalada por los jugadores a Robert Lewandowski por su partido oficial 100 como azulgrana. Blaugrana, con el 100 a la espalda, se la entregó Marc ter Stegen como capitán. «Felicidades a Lewy por sus 100 partidos con el Barça», dijo el portero alemán en voz alta.

Y que el equipo tiene hambre de títulos lo confirmó Lewandowski con el mensaje que transmitió a sus compañeros tras dar un abrazo a Ter Stegen: «Deseo más partidos como este no sólo en la Liga, también en la Champions». Sin duda, no hay mejor manera de afrontar el estreno en la nueva Champions League el próximo jueves en Mónaco (21 horas).

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