En los JJ.OO de Barcelona en 1992 hubo un antes y un después por lo que respecta a las ceremonias de la gran cita olímpica cada cuatro años con la espectacular inauguración en el Estadi Olímpic de Montjuïc. Con ocasión de la 37ª Louis Vuitton America’s Cup, la ciudad y la organización quisieron dar un paso más y montaron por primera vez una ceremonia de inauguración dentro del espectáculo de la Regata Cultural ‘Barcelona, faro en el mundo’, en la playa del Bogatell.

Una constelación formada por un millar de drones y un recital de cultura catalana repleto de artistas locales dieron la bienvenida, ante varios miles de asistentes, a la final de la Copa América 2024 en la playa del Bogatell de Barcelona.

Hubo tres ejes centrales: mar, viento y vela. Imágenes históricas del nacimiento de la Copa América en la isla de Wight, en 1851. Una mención a las Youth, Women y eSeries, y por supuesto a la Louis Vuitton…Barcelona Far al Món.

Una hora antes del inicio de la cita los más afortunados iban cogiendo sitio en la arena, para presenciar lo más cerca posible la ceremonia. Después de una cuenta atrás proyectada en la Torre Glòries, un millar de drones sobrevolaron la playa del Bogatell, iluminando el cielo barcelonés acompañados de constelaciones láser, pantallas LED, avatares y mares de luz. Acto seguido la actriz Asia Ortega en el escenario montado para la ocasión en el espigón con los bailarines, 22 en total, ejerciendo de sculptors. 

Los Drones, 1.000 en total aunque no volaron a la vez, simbolizaban las estrellas. El escenario, de dos partes con un cilindro rotatorio en medio. Se escenificó el nacimiento de la luz, con los espejos mirando al cielo. Y es que la luz nos transporta al mar/oceáno. Cielo y oceáno se estaban uniendo, con la silueta del manta raya y del pez dorado dibujado en el cielo con los drones representando las estrellas fugaces.

La banda sonora de Albert Guinovart sirvió de hilo conductor del espectáculo, donde también se mostrónn la belleza del planeta tierra.

Y entonces llegó uno de los momentos estelares de la noche, la aparición de los Castellers de Vilafranca, haciendo un 4 de 7 con todo a punto para recibir la voz de Silvia Pérez Cruz (‘Capitana’), con Asia Ortega y el Cor del Liceu. Y mientras tanto, los Castellers formando su torre. Sin duda un show muy televisivo, con grandes efectos visuales y sonoros.

Los primeros aplausos fueron para Ortega y la voz de Pérez Cruz. Llegó el  turno de ‘Abissal’, también con la voz de Pérez Cruz y la pianista Marina Ferlop.

Una voz pronunció el “Naveguemos juntos hacia una nueva era” y llegó la hora del Coro de la Escolania de Montserrat con los drones dibujando una figura humana (más aplausos).

Otro de los momentos cumbre fue la entrada en escena de Albert Guinovart (piano), Arnau Tordera (tenor) y la soprano Sara Blanch, y los veleros (barquitos) empezando a surcar las aguas: Barcelona Far al Món. La voz de Blanch estremecía…con el Cor del Liceu, un momento álgido y emocionante sin duda: “Sempre el mar, sempre el mar…”. Las embarcaciones eran un guiño a la máxima competición náutica que lleva celebrándose desde agosto en Barcelona y que en los próximos diez días vivirá su traca final.

El protagonismo del Gran Teatro del Liceu, con su Orquesta y Coros, fue notorio con Blanch y Tordera en lo alto del escenario: «Barcelona, Far al Món, Barcelona…». el himno interpretado por unas voces que pusieron la guinda del pastel a una exhibición impregnada de tecnología, música y cultura catalana.

Se estaba llegando al final, la imagen de la Sagrada Familia iluminada, preciosa y reluciente, incluso el Hotel W (Vela), reproducidos coordinadamente por los drones. Y el mensaje final: «Barcelona Far al Mon, el cierre, luz de estrellas…». Impresionante la voz de Blanch y Tordera.

Y hasta aquí la inauguración. 50 minutos emotivos e intensos, y los drones dibujando en el cielo los principales monumentos de la ciudad, los AC75…Barcelona. 

Y ahora a dar paso a la finalísima de la Copa América, al mejor de 13 regatas, Team New Zealand versus INEOS, a partir de este sábado 12 de octubre. Espera una Jarra…de las Cien Guineas.