Muy valiente ha salido el Stuttgart en su estreno en la Champions frente al Real Madrid y los blancos, que siguen con evidentes problemas en su juego, solo han podido pararlo a través de su mejor jugador cuando las cosas no van bien: Courtois. 

El belga completó, solo en la primera parte, cuatro paradas de mérito y sufrió, además, un larguero y otra intervención anulada por fuera de juego. 

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Así, en una de ellas, el belga sacó a relucir su calidad y buen hacer bajo palos y demostró sus reflejos ante un disparo de Undav que, de no ser por su intervención hubiera ido hacia dentro.