En la tarde de ayer la Federación Española de Fútbol denunciaba los insultos racistas que el delantero de la selección Sub19 y jugador del Athletic Club, Elijah Gift, había recibido de un jugador rumano durante la disputa del encuentro entre España y Rumania (1-1), dentro del torneo que se está celebrando en Budapest.

Esos insultos dieron pie además a una pequeña tangana al finalizar el encuentro: el jugador internacional español del equipo vasco se encaró con el jugador rumano que le llamó «negro de mierda». Ahora falta saber qué consecuencias disciplinarias tiene tanto para el futbolista en cuestión como para la propia Federación Rumana.

A tenor de lo recoge la propia normativa UEFA en su artículo 14, específico del racismo u otro comportamiento discriminatorio, el jugador rumano se expone a una sanción ejemplar que podría llegar a los diez partidos: «Toda persona que insulte la dignidad humana de una persona o de un grupo de personas por cualquier motivo, incluidos el color de la piel, la raza, la religión, el origen étnico, el sexo o la orientación sexual, incurre en una suspensión de al menos diez partidos o un periodo de tiempo determinado, o en cualquier otra sanción apropiada«.

También la propia norma recoge sanciones para la asociación, en este caso la Federación Rumana, a la que pertenece: «La asociación miembro o el club responsable será sancionado como mínimo con el cierre parcial del estadio». Pero además, como recoge el propio artículo, «Si las circunstancias del caso lo requieren, el órgano disciplinario competente podrá imponer medidas disciplinarias adicionales a la asociación miembro o al club responsable, como la disputa de uno o más partidos a puerta cerrada, el cierre del estadio, la pérdida de un partido, la deducción de puntos y/o la descalificación de la competición«.

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E incluso la normativa no descarta que todas las medidas que recoge puedan «combinarse con directivas específicas destinadas a atajar tales conductas«. Al existir denuncia por parte de la RFEF no es descartable que ahora se abra un procedimiento extraordinario antes de determinar la sanción definitiva.