Youssoupha Fall completó su mejor actuación como azulgrana en el triunfo ante Hipos Lleida. El interior totalizó 10 puntos y 5 rebotes en los 15 minutos de participación que tuvo. «Me siento bien. Mis compañeros tienen experiencia y me siento muy cómodo. Quiero ganarlo todo con este equipo, creo que lo tenemos todo y podemos competir con cualquier equipo«, mantiene el pívot en una entrevista para Barça One. «Yo solo quiero ganarlo todo y el Barça es un equipo que tiene que ganar. Intentaremos hacer alguna cosa especial este año«, asegura Fall.

Nacido en 1995, el nuevo fichaje azulgrana recalcó que el baloncesto no fue el primer deporte que practicó, ni del primero que se enamoró. «El baloncesto me ha cambiado la vida entera. Puedo ayudar a mi familia a que crezca. Cuando era pequeño no me gustaba, en Senegal todo el mundo juega a fútbol. Era un niño normal, me gustaba jugar con mis amigos. Cuando era un niño ya me gustaba el Barça. Me gustaba mucho Messi, era mi ídolo. Me gusta mucho el fútbol», explica.

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Youssoupha Fall se estrenó en España jugando dos temporadas en el Baskonia (2019-2021). «Recuerdo la primera vez que jugué en el Palau, era un aficionado del Barça. Antes de cada partido de fútbol escuchaba el himno. La primera vez que lo escuché en el Palau, me emocioné. Estaba muy contento, jugaba contra el Barça. Di lo mejor de mí, fue increíble», expone el interior azulgrana.

Roberto Dueñas dejó de ser el jugador más alto de la historia del Barça tras la incorporación de Fall (2,21). «Ser alto no es suficiente para jugar a baloncesto. A veces, cuando paseo por la ciudad la gente me dice: ‘Es fácil meter canasta’. No, no lo es. Tienes que trabajar más que nadie. Al principio yo no podía correr normal, ni saltar. Por eso hice atletismo. Tienes que trabajar más que los otros jugadores para poder ser un buen jugador», comenta Fall.

Su lado más personal

Youssoupha Fall tuvo un contexto muy duro en su infancia. «Cuando era pequeño, perdí a mi madre con 11 años. En 2017 perdí también a mi padre. Por eso no ha sido fácil. Mi padre era mi principal apoyo. Por eso intento dar lo mejor de mí, para que estén orgullosos y poder ayudar a mi hermana y a mi familia», expresa.

Por último, Fall aprovechó a lanzar un mensaje para las futuras generaciones en el mundo del baloncesto. «A los más jóvenes les diría que tienen que creer en los sueños. Que trabajen duro. Yo vengo de la nada. Era alto y delgado y nunca había jugado de baloncesto. Si trabajan y creen en sus sueños, el cielo es el límite», concluye.